¿Existe una relación directa entre el consumo de reishi y un sistema inmunitario fuerte? Sí, este hongo oriental es uno de los mejores remedios naturales para mejorar las defensas del organismo.

Diversos estudios confirman que la ingesta de reishi aumenta la respuesta inmune en pacientes con las defensas bajas. De igual modo, previene las infecciones virales y la oxidación de las estructuras celulares. El Ganoderma lucidum o reishi es, por tanto, es el aliado perfecto para disfrutar del invierno con plena salud.

El hongo reishi y el sistema inmunitario

La medicina tradicional china es una fuente inagotable de recursos terapéuticos naturales. Entre los más potentes y eficaces, destaca el reishi, conocido también como el hongo de la inmortalidad o de la eterna juventud. Sus propiedades resultan particularmente beneficiosas en invierno.

Con el frío, es habitual pasar menos tiempo al aire libre y llevar una vida más sedentaria. Estos factores, unidos a la proliferación de agentes patógenos, como virus y bacterias, representan una amenaza para el organismo. Reforzar el sistema inmunitario es la mejor manera de prevenir las enfermedades más habituales en esta época del año.

¿Qué beneficios aporta el consumo de reishi en invierno?

Una simple observación de los principios activos de este hongo permite hacerse una idea de sus extraordinarias cualidades terapéuticas. Los siguientes son solo algunos de sus muchos compuestos bioactivos:

• Polisacáridos: estimulan el sistema inmunitario contra infecciones bacterianas y virales.
• Betaglucanos: son un tipo de polisacárido que contribuye a acelerar la respuesta inmune y a equilibrar la flora intestinal.
• Triterpenos: compuestos antioxidantes y antiinflamatorios.
• Sales minerales: potasio, calcio, germanio, magnesio, hierro, cinc y manganeso.
• Aminoácidos esenciales.
• Alcaloides.
• Vitaminas del grupo B.

La presencia de todos estos compuestos bioactivos se traduce en múltiples beneficios para la salud. Uno de los objetivos fundamentales de la medicina tradicional china es preservar el equilibrio de cuerpo y mente. Esta es, precisamente, la función que desarrolla el reishi: regula los desequilibrios internos y combate de raíz las causas de muchas patologías. Por este motivo, está indicado para prevenir las enfermedades invernales más comunes:

• Gripe
• Faringitis
• Resfriados
• Enfermedades respiratorias
• Amigdalitis

Muchas investigaciones han demostrado que las bajas temperaturas debilitan las defensas y hacen que el organismo sea más susceptible a infecciones. Otro síntoma habitual de un sistema inmunitario débil es la fatiga. El reishi contrarresta estos efectos y ayuda al cuerpo a recuperar el vigor necesario para mantenerse sano. A continuación, sintetizamos algunas de las razones por las que su consumo resulta muy aconsejable todo el año, pero especialmente en invierno:

• Regula el metabolismo.
• Es un antioxidante natural.
• Es antiinflamatorio.
• Contribuye a mejorar el funcionamiento del sistema digestivo.
• Estimula la memoria y la concentración.
• Combate el cansancio y la fatiga crónica.
• Favorece la circulación sanguínea.
• Combate la ansiedad y el estrés.

En conclusión, este hongo con una tradición milenaria en la prevención de enfermedades es el complemento ideal para combatir el frío y sus consecuencias. Está demostrada la estrecha relación causa-efecto entre el consumo de reishi y un sistema inmunitario saludable. Sin duda, se trata de un regalo de la naturaleza que los antiguos chinos descubrieron y que la medicina moderna valora cada vez más.